miércoles, 8 de abril de 2015

UNA REFLEXIÓN SOBRE EL ASESINATO DE 15 POLICÍAS EN JALISCO


SOMOS UNOS HIPÓCRITAS.
(POR  MANUEL BAEZA )

(UNA REFLEXIÓN SOBRE EL ASESINATO DE 15 POLICÍAS EN JALISCO)


Es una verdadera tragedia. Y fue una carnicería. Un convoy de policías estatales de Jalisco se encontró con la carretera bloqueada por autos en llamas en la sierra que divide el centro del estado con la costa del Pacífico. Allí, en San Sebastián del Oeste, un grupo de criminales aprovechó para acribillar a los policías, con saldo de 15 uniformados muertos y cinco heridos de gravedad.




La noticia, terrible, no impactó a la sociedad; o al menos no a la mayoría de los mexicanos. El asesinato de 15 personas no preocupó a las organizaciones civiles (tan prestas a brincar de coraje cuando les conviene), pues los muertos eran uniformados y no estudiantes, o campesinos, o miembros de una ONG.


En el fondo lo que entiendo es que ni a los profesionales de la protesta, ni a los ciudadanos que se indignan justamente, les preocupan los policías ni las autoridades. Si los uniformados mueren solo voltearán hacia otro lado y pensarán que es un riesgo que corrían; que eso es parte de los gajes del oficio. Y a otra cosa.


No veo a nadie organizando protestas contra el narcotráfico, ni marchando en favor de los derechos de los policías, ni publicando desplegados o declarando ante los medios para condenar el asesinato de 15 personas.


No. La mayoría se quedará pensando que el suceso es algo trágico pero ajeno a ellos. Muchos otros ni siquiera penarán en eso mientras salen a la calle a buscar a quienes les surten de mariguana, cocaína, piedra o pastas.


Somos una sociedad hipócrita. Nos indignamos contra la autoridad, pero no queremos hacerlo contra los criminales. Mientras, habrá 15 funerales a los que sólo acudirán los familiares de los policías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario